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Las redes 5G y 6G podrían provocar que los semáforos desaparezcan

Una conexión más rápida, segura y con la posibilidad de tener más dispositivos conectados, sin latencia, son algunas de las virtudes que ofrecen las redes 5G y 6G, sin embargo no sólo se impulsa la conectividad sino también otras tecnologías, como la de vehículos autónomos y ciudades inteligentes. La posibilidad de tener más despliegue en estas redes también impulsará realidades en torno a incluso no tener semáforos en las metrópolis.


'Una de las posibilidades al pensar en tener un mayor uso de vehículos autónomos es repensar que no habrá semáforos en las ciudades, pues la comunicación entre dispositivos trae un orden distinto a como hoy se mueven las ciudades', señaló Nicole Rodríguez, vicepresidenta CTO de AT&T México.


Sobre este tema, la empresa alemana Bosch ya está trabajando a nivel de conectividad 6G para automóviles. Esto se está desarrollando a través de un proyecto llamado 6G-ICAS4Mobility donde se busca establecer una conexión más cercana entre los vehículos y el llamado Internet de las Cosas (IoT). 6G puede ofrecer velocidades de hasta 1 terabit por segundo, lo que podría desempeñar un papel clave para permitir que los automóviles interactúen con el medio ambiente y otros vehículos.


Sin embargo, para el despliegue de esta red, se necesita que 5G crezca más. 'Ya tenemos más territorios en el mundo con esta tecnología, pero hacia otras redes como la 6G la transición en cuanto a infraestructura será más rápida con 5G en forma masiva', Rodríguez. En el contexto de 6G-ICAS4Mobility, Bosch actualmente está investigando la tecnología en un entorno industrial y continúa expandiendo el proyecto.


Esta nueva red ampliada permitirá, a partir de ahora, una circulación totalmente autónoma en entornos especialmente construidos para tal fin, como fábricas o zonas muy concretas de las ciudades. Su funcionamiento será en realidad mucho más sencilla de lo esperada: el conjunto de elementos situados en un entorno concreto, como una calle, será leído a través de una serie de sensores y radares acoplados al propio vehículo.


Al mismo tiempo, los semáforos y los vehículos estarán conectados entre sí a través de la red 6G y también podrán comunicarse entre sí. De esta forma, se crea una imagen digital más precisa y se visualiza digitalmente un mapa completo del entorno en el que se encuentran.

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